las veces que me rompí
El tren me está dejando.
Querido papá, Te dedicaré cada una de estas cartas Que revelan que sufro en agonía mientras tu ni me veías.
❝Simples cartas de una simple chica suicida.❞ arte: El gran vals por Camille Claudel, 1889-1905
Lo único que necesitamos al final del día es un café acompañado de pequeña poesía. RECOPILACIÓN.
Ella vivía para morir. Yo moría por vivirla. ••• La melancólica historia de un chico que amó demasiado y una chica que perdió la cabeza.
❝No entiendo por qué te quiero, si tú odias el café.❞ Libro completo solo disponible en Amazon en formato físico y digital. Un camarero, a manera de versos, narra la historia de cómo comenzó a sentirse atraído por una de sus clientes, quien todos los días concurría a donde este trabajaba para consumir un café en silen...
Cada loco con su tema. El problema es que tengo demasiados. Ilustraciones de Sara Herranz.
❝Simples cartas de un simple chico enamorado.❞ arte: Casino por Joan Mitchell, 1956