- Jamás creí lamentarme de mi niñez, más sin embargo, ahora lo hago -dije mirando al suelo. - Yo no lamento nada -él se acercó a mi y tomó mis manos entre las suyas- No me arrepiento de nada porque eres lo más importante para mí. Levanté mi cara y de un jalón brusco me solté de él. - Son palabras vacías, dichas por alguien vacío -respondí y dí la vuelta para comenzar a caminar. - Te Amo -me detuve en seco pero no volteé- Eso no es vacío y lo dice mi corazón. Y con esas palabras lo supe, él era el amor de mi vida. Él era El Playboy de mi vida.

Chase: popular, egocéntrico, rico y el dios del sexo. Podría decirse que la escuela esta bajo su control, por lo menos eso creía el, hasta que llegó ella para demostrarle que aveces el alumno supera al maestro