Una vez más, Zeta cae bajo las garras de la despiadada Nación Oscura. Con un futuro incierto y bajo la tortuosa custodia de nada menos que Calavera, el joven señor de los zombis enfrentará una serie de horripilantes pruebas que pondrán en tela de juicio sus capacidades de supervivencia y la de los demás reclusos. Será tarea de Rex y el resto del grupo ir en su rescate para llevarlo nuevamente a la última sede en pie de la Nación Escarlata, pero su camino no será nada fácil. Zeta y los demás deberán lidiar con sus temores y secretos más oscuros para poder superarse y plantar cara a un nuevo enemigo a cargo de una de las naciones más poderosas: La Nación Militar. Una cruenta guerra entre tres poderosos bandos se avecina; en donde cada uno defenderá sus ideales con sangre. Zeta aprenderá por las malas, que la supervivencia ya no será una cuestión de elección, y que ahora, solo sobrevive el más fuerte.

Un viaje de intercambio: conocer nuevas personas, visitar nuevos lugares, aprender una nueva cultura. Suena genial, ¿no? Pues dejó de serlo para nosotros cuando el mundo se vino abajo. Las grandes ciudades fueron infestadas, la anarquía reinaba las calles. Cuando vimos a los primeros Zombis propagando la muerte, supimos que el ningún lugar sería seguro. Con la enfermedad avanzando hacia el sur y la gran esperanza de encontrar a nuestras familias con vida; tendremos que atravesar todo el país para llegar sanos y a salvos a casa.

En un futuro cercano la población de la tierra se ve dividida en dos. Por una parte están los humanos normales, por la otra están los híbridos, victimas de un virus que los transformo en criaturas parte humano, parte animal. Una malévola empresa busca aprovechar sus habilidades y convertirlos en armas. Una familia deberá permanecer unida para salvar sus vidas y la de su especie.

Ehogan Ironclaw, un hombre sin objetivo alguno más que el de mantenerse vivo, recibe una misión que lo pondrá en la búsqueda de de la autoredención. Pero, el pasado de un hombre es la pieza angular en el desarrollo de su futuro y Ehogan tiene un pasado del que muy pocos se enorgullecerían. Un pasado que ha empezado a cazarlo, un pasado que quiere verlo muerto. ¿Podrá Ehogan cumplir llegar a su objetivo? O será ahogado por las sombras que se ciernen sobre él como cuervos de negro plumaje sobre la presa muerta. Y es que el destino de Ehogan no está solo en sus manos, ni en el filo de su espada; sino regido por dioses antiguos y caprichosos con un poder que hasta ahora no ha sido enfrentado por nadie.