Nadie lo sabe. Solo nosotros dos. Nadie sabe de las miradas furtivas en la mesa cuando todos están distraídos. Nadie sabe de los roces intencionales cuando pasa junto a mí. Nadie sabe de esos largos chats que mantenemos durante las noches. Nadie sabe que hemos estado más cerca de lo que parece. Nadie sabe que a veces, en el armario, me susurra una que otra promesa. Nadie lo sabe porque es un secreto. Nadie lo sabe porque él tiene novia. Y ella es mi hermana.

Eileen usa un seudónimo para hablar con el chico que le gusta, pero no imagina que su identidad es el secreto más inofensivo de la red de engaños en la que vive. ** Para Eileen, la única persona que puede conocer su mayor secreto es también la última a quien se lo diría: su mejor amiga. A pesar de sus reservas, acaba por confesarle sus temores y juntas trazan un plan para que Eileen hable con el chico que le gusta sin que él sospeche de su identidad. Lo que ninguna espera es que lo que comenzó como un juego acabe por demostrarles que nadie en su círculo de amigos es quien dice ser. Ni siquiera ellas mismas. ** Primera historia del rejunte, autoconclusiva e independiente. Ganadora Wattys 2015 Advertencia de contenido: contiene referencias a la trata de menores y al suicidio adolescente. Recursos de orientación y prevención en la nota de autora.