Era año nuevo, las luces de los fuegos artificiales tapizaban de hermosos colores el cielo, destellos de luz que coloreaban delicadamente la noche y volvian más especial la velada. Ese día, un extraño objeto cayó justo en el patio de un solitario hombre que vive alejado de la civilización, quien no sabe cómo reaccionar ante tal acontecimiento. ¿Qué se supone que hace una persona con una burbuja gigante que cae del cielo y dentro contiene una criatura inmóvil? Pensó, entonces, que algo tan hermoso debía ser cuidado. -------------------------------------------------------------- Karatodo. Capítulos cortos, dudo lleguen a pasar de las 400 palabras.

"-No necesito amigos" "-No necesito amigos, porque los tengo a todos ustedes" Esa era una realidad bastante penosa, sobre todo porque al momento en que había dicho aquellas palabras la única persona que estaba vagando por su mente era él. Él chico por el cual se encontraba profundamente perdido; su hermano. Jyushimatsu, aquel a quien muchos consideraban un caso perdido, ¿Sería su forma idiota de comportarse? pesé a lo que sus demás hermanos pensarán de él, para Ichimatsu el antes mencionado significaba una sola cosa "Mi salvador" es lo primero que pensaba al dormir y al despertar. Porque en algún punto de su vida, ese chico se había convertido en su adoración, en algún punto de su vida había comenzado a darse cuenta de que no imaginaba una vida lejos de esa voz que lograba tranquilizarlo y esa sonrisa que siempre estaría ahí para él. Sin embargo, ¿Jyushimatsu pensará lo mismo que él? ¿O será simplemente desplazado por la perdida de su primer amor? Ichimatsu solo tiene algo en claro, y es que él hará que su hermano vuelva a sonreír y esta vez no cometerá el mismo error de antes; Dejar que esa hermosa sonrisa le pertenezca a alguien más.

¡No pueden estar toda la vida enamorados de Totoko-chan! (Contienen OC'S)