fictionmaker16
Collin Westbrook es enviado a un internado muy extraño, que antes de ser una residencia para adolescentes, fue un espantoso centro para enfermos mentales o dementes o locos, como queráis llamarlos. De ese centro, en los últimos y más ocultos pisos del viejo edificio quedan aún habitaciones con sillas eléctricas y curiosos objetos de tortura, de los cuales Collin desconoce su utilidad.