Mini fanfic/Wigetta: Coffee Cup.

Esta es una sección de DRABBLES Wigetta. ¿Qué es un drabble? es una historia muy corta, y se nota la diferencia entre oneshots, etc. La cuestión es que, cada drabble son relacionados a sucesos que pasen en Twitter o Youtube con Willy y Vegetta! Y me gusta hacerlos como si fuesen ellos mismos, con sus personalidades y tal. Cada historia o drabble es DIFERENTE, y ninguno tiene una continuación. Salvo de si es algún especial. Así que tienes más de diez historias para leerte :) Aunque considero que hay mejores 'realismos' que los que yo hago, pero bueno así se aprende creo :P ~~~~~~~~~~ Todo lo que podrías leer son creadas en MI propia imaginación, por lo tanto es ficción. @NaiWortley (Twitter) // maheismine.tumblr.com Portada: @bulmagetta Empezados a partir del 2015.

Samuel y Guillermo se conocieron durante su infancia, se convirtieron en grandes amigos y hasta en algo más que eso... pero por cuestiones que ellos no entienden y que el destino escribió, tuvieron que separarse. ¿Qué pasaría si ellos volvieran a encontrarse diez años después?

Raspberry siempre ha observado todo con atención y silencio, pero eso no significa que tenga poco que decir.

Mi corazón golpeó con fuerza mi pecho y mi respiración se cortó repentinamente al escucharle decir aquello. Rubius sólo seguía observándome, suplicante, con lágrimas de desesperación en sus ojos. -Por favor...- susurró con voz quebrada- Tienes que creerme... por favor... Mangel... Tragué saliva bajando mis párpados, intentando evitar su mueca de frustración. -Por favor...- sollozó una vez más cerrando sus ojos, rendido. Volví a mirarlo... y armándome de valor... lo dije. -Te creo. Quería creerle... quería confiar en que... Rubén no se había vuelto loco. °°°°°°°°°°°° Historia con contenido de Terror Psicológico. ................ Recomendación personal: Leer en la noche, tapado con las sábanas de tu cama hasta la cabeza, cuando tus padres y/o hermanos se hayan dormido. Y por supuesto... Luces Fuera :)

¿Qué haces cuando sientes que no puedes más? ¿Cuando sientes tanto dolor que preferirías no volver a sentir nada en absoluto? Él quiso escapar del huracán de su vida, Samantha, pero después de todo el dolor que ella le hizo pasar, a este chico sólo le quedó escribir 33 cartas, cartas llenas de furia, dolor, amor y venganza. Él va a hacer que ella se arrepienta, que lamente haberlo conocido, aunque para eso él mismo tenga que pagar un precio mucho más alto. #01 en Misterio / Suspenso (Mayo) #15 en Misterio / Suspenso (Abril) [Primer Lugar en Premios Árbol de Plata 2016] [Historia ganadora de los Premios Gaeina 2016] ¡AVISO! -Prohibida la reproducción total o parcial de la obra. -Novela registrada en Safe Creative. -Licencia: Todos los derechos Reservados © Hermosa portada por: @MissJacksonOMG Trailer por @EditorialDiosas Soundtrack en Spotify / "33 Cartas"

Samuel y Guillermo son dos prisioneros que empiezan su relación con mal pie. Uno hará lo posible para encarar al otro, quien, en vez de rendirse y dejar de molestarlo, se hará cada vez más pesado. ¿Qué pasará entre estos dos chicos? ¿Decidirán, alguna vez, llevarse bien? Sus días estaban contados, y lo único que querían era disfrutar el resto de sus vidas. ¿Y que mejor manera de hacerlo, que torturando a alguien, que desde el primer momento le había caído mal?

Cuando en verdad caes enamorado, hasta el mínimo defecto de esa persona es borrado por tus ojos y corazón. Y eso es lo que le pasó a Ruben cuando conoció a Miguel. Y aunque ambos no podían comunicarse, encontraron una forma de hacerlo.

Cuenta la leyenda, que hace cientos y cientos de años, los dioses decidieron darle un pequeño regalo a los mortales; un pequeño regalo de amor que sería recibido por algunas parejas afortunadas... A veces algunos regalos se convierten en maldiciones. *ESTA HISTORIA NO ESTÁ EDITADA NI CORREGIDA, ES UN BORRADOR* © Todos los derechos reservados Cecilia Vlinder 2016

En definitiva; quien dijo que el amor tenía barreras no conocía la realidad. Perfectos, imperfectos, ¿qué importaba? Eran un complemento ya, se querían, y quien no pudiera notar que aquel amor era de verdad -y podía sobre pasar barreras-, ese sí que era un verdadero ciego. - «Nana.»