Querido Idiota...
¿Que qué ganaba mandándole aquellas groseras cartas a su compañero? Absolutamente nada. Sin embargo, desde que envió la primera se volvió una costumbre expresarle su odio por medio de un papel en lugar de hablarle de frente. Tomó su pluma, un pedazo de papel y comenzó a escribir. "Querido (no tan querido) idiota..." [...