Señorita Sara estoy harto de su actitud, que le costaba hacer un ensayo de tan solo una página de un autor que venimos viendo hace más de un mes, le he mandado un correo a su padre citandolo mañana a primera hora, entonces te respondí... Mire Juan él nunca revisa su correo, anote este numero y le habla por whatsapp, vi cómo te ponías rojo de la rabia y dijiste... Perfecto dígale que este atento a su móvil le escribiré en la noche ah y otra cosa señorita Sara no me llame Juan soy su profesor, no un amigo más. Como tú digas Juan! Le respondí azotando la puerta de su oficina.