Recuerdos Oscuros
Todo y nada. Eso me quedaba. Las partidas eran lentas y la vida; ya no era tan justa. Quedan palabras, sin decir, sin escuchar. Tenemos ojos para ser ciegos y oídos para ser sordos. ¿Qué decidirías si tuvieses que elegir uno de los dos caminos? Ambos son absurdos, pero siempre uno resultará más interesante que otro. E...