Ras y Max. Dos chicos enamorados locamente el uno del otro. Son conscientes de sus sentimientos pero.. Todo cambia cuando hay terceras personas. Cuando tienes miedo a que la gente sepa de la relación . ¿Serán capaces seguir a delante? ¿Abandonará Ras el miedo a que sepan su orientación por Max? Descubre que pasa cuando el amor desborda pero la desconfianza asoma...

#sexogay #inolvidable

Mi nombre es Scott Schneider, estoy por cumplir 19 años, vivo solo, estudio en un colegio privado y soy gay... Desde que entre a estudiar en el colegio he estado profundamente enamorado de Ryan Velez, un chico simplemente perfecto... ¡que no sabe que existo! Tengo dos mejores amigos Kennat y Jessica, un poco locos y desequilibrados pero siempre estan ahí cuando los necesito. Mi cotidiana, simple y aburrida vida empieza a cambiar cuando inesperadamente me vuelvo un imán de hombres, menos del que me interesa... La innesperada aparición de un hombre me causará una 'Sexy Confusión'y hara que dudé de mi amor hacia Ryan... Amor, Odio, Desesperación, Nervios, Inquietud, Miedo, Excitación, Frustración, Confusión y Sexo...Es lo que él me hara vivir. Nuevas amistades, traiciones, peligros, descuidos y enfrentamientos llenarán de buenas y malas experiencias mi vida dejándome una gran lección en el camino. Advertencia: Esta historia tendrá contenido sexual y explícito entre relaciones homosexuales, si no te gusta evitate y evitame las molestias e ignora esta novela.

Puede que Logan Wilkinson sea unos de los chicos que más gustan al sexo femenino y que provoca que el masculino intente imitar. Se hace de rogar con cada mirada, gesto o incluso movimiento. Pero nadie, absolutamente nadie, conoce de su infernal vida fuera del instituto. ¿Quién sabe que él tiene un padre ludópata? ¿Quién puede adivinar que debe trabajar para que no le quiten la casa porque su progenitor es lo suficientemente estúpido como para no pagar las deudas? ¿Quién reconoce que nadie puede salvarlo de tal sufrimiento? A lo mejor, al fin y al cabo, su vida solo puede estar destinada al fracaso de cuidar toda la vida de su padre. O, quién sabe, a lo mejor un vómito, por asqueroso que suene, puede cambiar tu vida al completo. *** (NOVELA SIN EDITAR. SI ENCONTRÁIS ALGÚN FALLO DE REDACCIÓN, ORTOGRÁFICO, ETC. ¡LO SIENTO MUCHO!) Tercera entrega de la Saga "Universo de colores". Queda terminantemente prohibida su copia y/o adaptación. NO ES NECESARIO LEER LAS ANTERIORES PARA COMPRENDER ESTA. *** 117# en NOVELA JUVENIL (¿Les he dicho que los amo?❤) 114# en NOVELA JUVENIL (¡Son increíbles!) 94# en NOVELA JUVENIL (Moriría sin vosotrxs) 88# en NOVELA JUVENIL (¡Ni yo me lo creo!)

Sydney: Una chica invisible ante los ojos de todos. Estudiosa y aplicada con una vida casi perfecta. Alex: ¿Típico mujeriego? No. Más bien es un chico misterioso. Todos le temen, pero... ¿Cuál es ese pasado que no se atreve a revelar a nadie? Sin embargo, todo cambia cuando la vida de Sydney y Alex se cruzan por casualidad. Ella se ve atraída hacia el misterioso chico de ojos azules que es frío con todos. Con todos menos con ella. Intentará alejarse de Alex, pero en el intento tal vez acabará... ¿enamorándose? "Nunca pensé que mi vida iba a cambiar por culpa de este maldito chico." **** Todos lo derechos reservados. No se permite adaptaciones y/o plagio.

Todo empezó por un juego y un beso. La pobre Daisy pasó de no tener ningún pretendiente a tener docenas. Incluyendo al playboy de la escuela.

La vida de Dominic Armstrong siempre había sido un tormento. Durante su infancia y adolescencia tuvo muy mala relación con su padre, presenciaba la violencia con frecuencia a causa de su alcoholismo. Regresaba a casa ebrio y lleno de ira, comenzaba a golpear a su esposa sin razón alguna. Dominic intentaba apartarlo y atacarlo de la misma manera, pero su fuerza no era suficiente para detenerlo. Ahora con sus veintiún años de edad, seguía atormentándose por lo ocurrido. Se sentía responsable de que su madre estuviera muerta, si tan sólo hubiera llegado a tiempo ese día... Todo parecía estar perdido. Sin sentido. Sin motivación para seguir. Las únicas sensaciones que estaban en su mente era la injusticia, odio y desprecio hacia la vida. Sin embargo, esta serie de palabras se opacaron cuando se cruzó con una chica en una situación, aparentemente, insignificante. O al menos eso parecía.