- Prométeme que mañana cuando venga, vas a estar respirando, con tu corazón latiendo, y esperándome con una radiante sonrisa en tu rostro.- Aprieta suavemente mi mano, para luego depositar un beso en ella. - Sabes... que no te puedo prometer eso.- Susurre con melancolía. - Si puedes, solo espérame ¿si? - Negué lentamente con la cabeza. - Ahora yo no mando en mi vida. Son las máquinas que me ayudan a "vivir" si se podría decir.-Murmuré con cierta gracia. Él soltó un largo suspiro, seguido de un casi inaudible sollozo y por primera vez desde que lo conocí, lo veo llorando y devastado. - ¿Porque te tiene que pasar esto a ti? ¿Porque no pude ser yo? ¡Te quiero a mi lado! - Dice con la respiración agitada y unas cuantas lágrimas saliendo.- Sólo te disfrute un año, y ahora viene una estúpida enfermedad y sin más te arrebata de mi lado.- Suelta mi mano y despeina su cabello. - Estuve contigo dos años. Otra cosa, sea que estuviste casi un año comportándote como un idiota.- Bromee, pero mi voz se quebró al final. - ¿Porque tan solo un año? ¿Porque desperdicié tanto tiempo portándome, en vez de decirte lo especial que eres? ¡Eres todo para mi! ¡No te puedes ir! ¡Por favor! - Vuelve agarrar mi mano y se pone en la frente.- Te amo Jess...- Hermosa portada hecha por @natalia14alejandra ❤Gracias...!!

Kea es todo lo que Fidel no quiere: grosera, impulsiva y problemática. Entonces ¿por qué parece no poder sacarla de su cabeza? Queda prohibida la reproducción total o parcial de este material por cualquier medio sin el previo y expreso consentimiento por escrito del autor. Obra registrada y protegida por SafeCreative bajo el código 1601256337033. Todos los derechos reservados ©