>>Dos Caminos<<
Un triangulo amoroso
-¡No soy invisible! -gritó molesta, ganando la atención de aquel chico azabache que se volteó y la vió con una ceja arqueada. -Creo que si lo eres... Sus hermosos ojos azules se abrieron como platos al escuchar eso, tal vez si era invisible pero no tenían que recordárselo y... Estaba dispuesta a demostrarle lo contra...