Los Juegos del Hambre
-Ita...¡Itachi! - rugió avanzando entre la multitud. ¿Cómo era posible que el mayor hubiera casi subido a la tribuna mientras él estaba sin hacer nada? Pronto los guardias se acercaron a su encuentro al ver su sentir. Sasuke jamás se había sentido tan expuesto, siempre había sido el chico rudo y arrogante que todos pr...