Give You Heart a Break.
Solíamos ser cuatro. Tres niños, y luego estaba yo, la niña. Éramos como una familia y yo era la hija única, la mimada, por la que todos peleaban. Pero todo tiene un final, dicen. Y tuvo que llegar él. Más hasta el día de hoy me sigo preguntando, ¿habrá sido el final, o un nuevo comienzo?