Él, era alto. Ella, era más bien baja. Él, tenía el pelo rubio dorado. Ella, tenía el pelo castaño oscuro. Él, siempre había sido muy extrovertido. Ella, era callada. A él, nunca le había caído bien ella; Ambos asistían a la misma clase de literatura.

La primera mirada en el espejo en la mañana, puede reflejar algún recuerdo de pecado de la noche anterior. Se prohíbe adaptaciones, y cualquier forma de reproducción parcial o total de éste material sin la autorización debida del autor. Todos los derechos reservados.