_Violetsunshine_
Un sentimiento tan intenso como puede ser el rencor, la ira o el propio odio, no se puede disipar en cuestión de segundos, a veces incluso te acompaña para toda la vida, como una sombra que se adhiere a tu cuerpo para tragarte en vida.
Estaba absorta, cubierta y abrumada en ese tipo de sentimientos cuando recibí la carta que me sentenció sin vacilación para el resto de mi vida, sin lugar a retorno o segundas alternativas.
Había dos caminos por recorrer, el que ardería y me consumiría en tales emociones o el que me haría relucir en fortaleza y poder.
Todo un Imperio, lleno de riquezas y lugares por descubrir, frente a mis anhelantes ojos de deseo y ambición, a tan solo un paso de mí, a tan solo unas ligeras mentiras que susurrar... y entonces yo sería la Emperatriz.