Un simple juego de dos niños puede llegar a hacerse realidad, el único objetivo es jugar con el destino. Dos amigas deciden hacer un viaje hacia Corea del Sur para conocer a sus ídolos. Tres años y no tienen ningún éxito pero aparece una oportunidad inesperada que en sí es algo extraña. Se dice que al amor no se le puede forzar a aparecer. Entonces, ¿un amor forzado está destinado al fracaso?

Quizás, solo quizás, algún día, vuelva a verte, o a amarte tanto como lo hice o quizás.. algún día me ames tanto como yo a ti.- y esas fueron mis ultimas palabras.

Esa sensación nuevamente cada vez que lo veo pasar a mi lado siento unas enormes ganas de hablarle pero no me atrevo creo que quiza jamás lo haré y él chico de sonrisa bonita tampoco tendría porque hacerlo creo que después de todo esta historia nunca comenzará... y si comienza no quiero que termine nunca

Está historia se encuentra publicada con Nova Casa Editorial. --- Kara tiene un pasado del que no se siente muy orgullosa. Owen ha trabajado muy duro por eliminar todos los gramos de grasa con los que cargó durante su adolescencia. Ellos se reencuentran de nuevo y Kara está segura de que es el karma que quiere hacerla pagar. Él, Owen, no piensa desaprovechar la oportunidad que le ha dado la vida para poder vengarse de ella y todo lo que le hizo pasar. 《Del amor al odio hay un solo paso. Del rencor al perdón, ¿cuántos besos hay?》 Queda prohibida la reproducción total o parcial de este material por cualquier medio sin el previo y expreso consentimiento por escrito del autor. Obra registrada y protegida por SafeCreative bajo el código 1601256337088. Todos los derechos reservados ©