Quién te crees
Era su gran oportunidad. Se había preparado durante años para lograr impresionar a sus jefes y un imbécil en toalla jugando a ser gracioso no le iba a chafar sus planes. Anahí mantuvo la compostura y terminó la entrevista de Alfonso Herrera con toda profesionalidad, pero cuando la cámara se apagó, desató toda su ira...