Con 22 años, Devon Winslet ha cumplido lo que para muchos solo existe en sueños. Ha visitado todos los continentes, comido en los mejores restaurantes y divertido en los mejores lugares. Son las ventajas de ser el hijo único de padres millonarios, pero, ¿es realmente la vida que quiere llevar por el resto de su existencia? Devon, no forma parte de la generación de hijos de papí y mamí; sus aspiraciones son las de alguien que pretende triunfar en la vida y que espera ser reconocido por ello. #LGBTEspanol Dí no a la homofobia.

"Solía vivir una aburrida vida como todos los demás. Liz Prickman, un nombre que parecía no significar nada hasta que ese día lo cambió todo. Lo que encontré aquella tarde común y corriente, cambió mi vida para siempre, mi forma de ver el mundo y de las personas que me rodean. Puso a prueba mi amistad con los amigos que mas quería. Puso a prueba hasta mi propia cordura".