Hasta que las estrellas se evaporen (Terminada)
El dolor que sientes no es como el fuego que puedes apagar con un poco de agua. El fuego se extiende por todo el cuerpo dejándote vulnerable a él, no puedes pensar en otra cosa más que en el sufrimiento mismo. Dejándote derrotado en el suelo mientras te haces cenizas. Ese es mi destino, ese es mi dolor.