El libro del Ángel
Cientos, miles de veces le habían prohibido acercarse a aquel lugar, a aquella casa señorial abandonada por el paso de los años y renegada a un segundo plano en aquél barrio al que pocos podían aspirar, aún y así el tomó la decisión de ignorar todas las voces, todas las órdenes que disfrazadas con una sonrisa le corta...