Stephantu
Ellos están siempre junto a nosotros, siempre cerca, siempre mirándonos. Almas que no pueden irse, que no pueden ser libres. ¿Por qué siguen aquí? ¿Cuál es su propósito? Ya nada es seguro, excepto una cosa: Debemos vigilar nuestras espaldas.
Para muchos estas almas perdidas son un privilegio, una bendición. Mi historia, sin embargo, dice lo contrario. ¿Y si te digo que ellos pueden estar contigo... incluso más cerca?