Mérida Foster es una linda, pero de baja autoestima, chica. Tiene una tez blanca y pálida, de rasgos alemanes. Un cabello marrón claro, muestra de que tiene rasgos ingleses. Sus ojos son marrones, comunes y corrientes, pero con unas largas y onduladas pestañas. Su nariz es respingada y fina. Su arco de cupido es pronunciado y lindo, el cual le da forma a sus lindos labios de fineza pura. Su cuerpo no es el más envidiado, pero sí el de los finos. Su estatura es alta, y sus piernas son lo que más resaltan y tal vez sí se pueden envidiar. Mérida siempre mira hacia abajo, pensando en que todos son mejores que ella. Mérida siempre cree que ella es lo peor. Mérida es tímida y vergonzosa, y rara vez la oyes hablar. Tiene el arte de saber escuchar. Cuando comienza a ir al psicólogo que le recomiendan, le enseñan la técnica de contar hasta el número diez en su mente para poder calmarse. Pero la mayoría de las veces llega hasta el número tres.

Minho era súper mino, tenía el pelo negro peinado hacia arriba, tez bien morena gracias al sol, ojos café caca, pestañas largas, nariz normal y labios bien carnosos. Le encataba huebiar a las personas, por todo. Igual a todas las cabras les gustaba el huebeo, así que por ende, les gustaba el Minho. La Sejofa, que se llamaba Josefa pero le decían Sejofa, era callada, vergonzosa pero siempre digna. Le gustaba huebiar pero solo en confianza, y también le atraía el wachito del Minho. Había conocido al cabro en una chistosa historia para muchas personas, pero vergonzosa para ella. A la cabra ya le había comenzado el odio por el ahueonao del Minho, pero a veces lo que empieza en odio, termina... en más odio. O en algunos casos, en amorsh. Una historia llena de huebeo chileno, odio y más hueás, que una vez que entras... salí cuando querí. Todo esto y muxo mah en... No es otra cursi historia. BASADO EN HECHOS REALES. Saludos a BDC

Él sufría de insomnio. Ella le temía a las noches. Se parecían notablemente, pero no se entendían nunca.