lassarusmortiferum
Quizá la salida no es tan obvia, los destellos de belleza me segaron, quizá no son tus ojos ventanas de tu alma, pero puedo jurar que me mataron.
Que las rosas mueran en ataúd y las aves de pie si mi amor no fue sincero, que mis canciones no se escuchen al nombre de la radiante llamada por los ángeles, que la seda me quemé de rojo la piel y los querubines me acechen con la melodía que me alejó de mi camino.
Ya no me molesto en preguntarme a mí mismo al manto de las estrellas si piensas en mí, ya no le hago preguntas al techo que harto está de escuchar de ti, ya no le pido consejo a la guitarra que me contesta con tu vivificante retrato, ya me di cuenta que era tu aroma que me arrullaba hasta el sueño pero no me dejaba dormir.
Resulta ilimitada la cantidad de adjetivos que existen en mi cuando se trata de hablar sobre ti, la cantidad de pensamientos que me inundan la cabeza se expanden por todo el universo, deformas la belleza y la moldeas a tu capricho para ser la más hermosa flor de las más hermosas primaveras que mis ojos hayan presenciado, qué pasa con las lágrimas que escaparon de mis ojos intentando ir hacia donde estás?
Tu, gracia en persona que osa de bailar para que mi corazón lata de prisa, calla tu resonante voz que haces eco en mi memoria,para ya con esos ojos no ventanas del alma que me derriten al tacto, no me des excusas o explicaciones, pues te amo alma libre y siempre lo haré, brilla en la oscuridad, resuena en la tranquilidad, pinta en blanco, grita en alto y hazte de mi caballerosidad, de mi atención a las demás, de mis ganas de no verte más y entierralas bajo mar, donde nadie más las pueda hallar.
Ahí dime la verdad, aunque caigan trozos de vidrio del vaso que sostenía, pues aún así por tu noble compañía me sometería, que sepan que como otros no era, y que no te ven como yo te veía, eres especial y mi corazón no se agita igual con cualquier tono.