Todo lo que siempre te dije y nunca creíste.
No guardé nada. Te lo entregué todo. No quedó nada en mí. Pero, ¿para qué? No me creíste.
Concluídas
No guardé nada. Te lo entregué todo. No quedó nada en mí. Pero, ¿para qué? No me creíste.
Segunda parte de 'Abigäil'. "Te colaste en mi corazón. Me di cuenta demasiado tarde. Pero, quiera o no, tengo que aceptarlo."
"Llevo un mes sin verte. Ni a ti ni a tu sonrisa, la que me mata y me da vida. No me hagas esto, por favor."