Katherine es una chica de dieciséis años cuya familia no la respeta demasiado. Ella es inteligente, alta, morena, con ojos marrones, con un complejo de gordura tatuado en su interior. Ella es una chica medianamente feliz lo cual hace que vea el mundo en colores en lugar de verlo como otra persona en su lugar la vería. Su felicidad irrompible viene dada por una amiga que la lleva a vivir aventuras, su única amiga. Jaguar es un hombre de 29 años, solo sin más familia que sus amigos, con una pasión: el Boxeo. Es el rey de las peleas ilegales. Tiene un carácter dominante por ello es temido y respetado por todo aquel que sabe su nombre. El tiene unas normas que todo el mundo conoce, todo el mundo salvo... Katherine. ¿Qué sucede cuando una adolescente inocente rompe las normas de un Jaguar violento? Nunca nadie pensó que una toalla cambiaría la vida de tantas personas. Aviso: Esta historia contiene vocabulario agresivo y descripción explicita de escenas violentas y sexuales.

Livy no es tipo de chica que Cage West miraría más de dos veces. La mejor amiga de su hermana no le ha despertado nunca ningún tipo de interés en el guapo motorista, o eso es lo que él intenta creer. Livy es inocente, tímida y tiene su propio mundo. Va a ser medico. Nunca podrá formar parte de su vida, por muy acostumbrada que esté a los secuaces de su padre. Pero ella quiere. Está harta de ser la niña que observa como Cage salta de cama en cama. Livy és un niña, sí, pero eso no quiere decir que vaya a dejar que la dejen en un segundo plano. -¿Quieres que te trate como una mujer? Bien, pero luego no llores si te arrepientes. -Eso nunca, que te quede claro.