Prólogo. Conocer la mente humana ha sido la mayor fascinación del ser humano. Ya que la mente de por sí es bastante compleja y tiene múltiples áreas de estudios. En mi caso, conocer el porqué de la depresión es algo que siempre me ha llamado la atención, pues tiendo a ser una persona depresiva. Desde los 7 años hasta los 20 años me creía un perdedor, un fracaso de la vida. Pero cuando tocas fondo es allí cuando en verdad empiezas a conocerte a plenitud. Actualmente tengo 22 años de vida y estoy por cumplir los 23 años. No necesité un psicólogo, porque a mí eso no me funcionó. Ninguno supo tratar mi condición. Ni las medicinas que me mandaron fueron eficaces. La única cura a mi profunda depresión fue mi Señor Jesucristo. El único que mató literalmente mi depresión y que gracias a él, puedo detectar fácilmente mis estados emocionales tanto positivos como negativos. La presente obra, no tiene como fin buscar la fama ni nada por el estilo. No soy un experto en neuropsicología, antropología, psicología, programación neurolingüística (PNL), ni nada por el estilo. Simplemente quiero mostrar cómo es una mente depresiva, cuales son sus características y comportamiento, todo desde mi propia experiencia de vida, pues desde los 6 años me creía un fracaso, erróneamente me creía un perdedor, pero eso fue por desconocimiento y por falta de la ayuda idónea. Siempre tuve a mis familiares que me aman mucho y me apoyaban como podían, pero su falta de conocimiento acerca del tema. Por que amor, cariño y comprensión, NUNCA me faltó. Aún así, como he dicho anteriormente solamente quiero aportar mi pequeño granito de arena, mi forma de analizar las cosas para que aquellos que se les dificulta comprender la mente depresiva, puedan utilizar las herramientas necesarias para evitar ese mal que a todos en algún momento de la vida llega a nosotros.

Una serie de creppypastas originales y conocidas

[Advertencia: Yaoi, Lemon, OoC] El Joven Conde Ciel Phantomhive ya de 15 años, sufre un desmayo, el cual alarma a todos sus leales sirvientes, pero sobre todo a su Mayordomo-demonio, esta historia nos lleva a ver a un conde pasar por un comportamiento extrañamente dulce, educado y elocuente, cosa que moverá algo en el mayordomo, ese algo que existía y se dará de forma interesante.

Cuando los padres de Samantha deciden irse de viaje, no tienen la peor idea que dejarla a cargo de Tyler, su nuevo niñero. Tyler y Sam son el agua el aceite, sin embargo, deberán aprender a lidiar con sus diferencias.