Mi asfalto, tu cuerpo.
El pasado me atormenta. No todas las heridas han sanado, y las que lo han hecho, amenazan con volver ha abrirse. Le tengo miedo al mundo aunque encierre el miedo bajo muros y muros. Ahora aparece él, arrogante, creído, posesivo y muy, pero que muy caliente. A veces dulce y cariñoso, a veces malhumorado y violento. Per...