Todo mundo tiene un punto de quiebre, un punto donde ya no se puede aguantar más no importa lo mucho que lo intente. Hannah Hale ha llegado a ese punto. Su manada está rota y ella debe de tomar control de las cosas. Incluso si eso significa regresar a ser una versión de sí misma que juró había enterrado. Hannah tendrá que ir en contra de Scott McCall para rescatar a Lydia, que ha sido ingresada a Eichen House. Y sobre todo, para hacer algo que el Alfa Scott nunca permitiría, que asesinase a Theo Raeken de una vez por todas. Para buena suerte de Hannah, él ya no es su Alfa.

Conoce todo sobre mis personajes.

Una historia de Liam Dunbar. *** -Prométeme que todo estará bien... -pero... -que seguirás adelante... -pero... -prométeme que igual me seguirás queriendo, aun cuando ya no este... -no podría vivir sin ti... -tienes que... -eres mi otra mitad... *** Disclaimer: no me pertenece ninguno de los personajes (salvo _______) o sucesos en esta novela, todos los créditos van a Jeff Davis

Voces que no podía controlar, el amor que llegó salvandome de todo aquello que me definía. Yo no podía, a pesar de todos los problemas, olvidarme del color de sus ojos aunque la maldición estuviera en mis venas. Portada hecha por @Imorly

«No los escuches... No les contestes.... No los veas.... NO. GRITES.» Lydia Martin puede parecer una chica normal. NO LO ES. Detrás de su hermoso rostro se esconde un pasado traumático y un secreto: esquizofrenia. Ella cree que al salir de Eichen House, el psiquiátrico donde fue retenida con tan solo quince años, las cosas podrán ser normales de nuevo. SE EQUIVOCA. Pero cuando regresa a Beacon Hills, Lydia se da cuenta de que las voces parecen haber estado esperando a por ella. E inquietantes preguntas comienzan a ser planteadas: ¿Cuándo comenzaron? ¿Quiénes son? ¿Son reales o producto de su imaginación? Pero quizás, la pregunta que debería realizarse es... ¿POR QUÉ LE PIDEN QUE GRITE? |Prohibida su copia total o parcial sin el permiso de su autora|

-Jess tranquila -me miró él -Prométeme que todo estara bien... -Jess... -Prometeme que seguirás adelante... -Pero... -Prometeme que igual me seguirás queriendo, incluso cuando ya no esté... -No puedo vivir sin ti... -Tienes que... -Eres mí ancla, mí compañera... Las lágrimas comenzaban a caer por mis mejillas, Liam estaba con los ojos llorosos mirando hacia todos lados desesperados -No hagas esto por favor no puedo perderte -Scott me mira con los ojos llorosos -Tiene que ser así hermanito. Me salvaste de todo, era mí turno ahora -sonrío llorando -¡HOY NO VAS A MORIR JESSICA! -grito Scott y el le indico a Liam que salga corriendo con el déjando a todos atrás ATENCIÓN: ESTÁ PROHIBIDA TODA COPIA O ADAPTACIÓN DE ESTA HISTORIA, GRACIAS.