LO SIENTO, ERES MÍA.
-¿Porque no me mirás a los ojos? -preguntó con un tono burlón. -Porque no le veo nada de interesante a tu ser -respondí simple. -Deja de estar a la defensiva, Noah -pidió con voz más suave- Hemos venido a hablar de nosotros aquí. -¿«Hemos»? ¿«Nosotros»? -pregunté sonriendo divertida- Yo he accedido a venir para escuch...