Simplemente una joven escondida entre el tumulto, solo eso. Nada más, ni nada menos. No búsqueis misterio dónde abundan silencios. Ni rastro de soledad dónde carecen sonrisas. Se llama evidencia; no le busquéis los tres pies al gato, dónde no hay gato. Preguntas sin respuestas, corazones sin dueño, y lágrimas sin destino. Podría llamarse cliché, no lo niego, pero es lo que siento, no hay más misterio.