DIARIO DE ANOREXIA
Sacaban una camilla de una de las habitaciones de la clínica. Una mujer lloraba sin consuelo. Pero esa mujer, ¿no era mi madre? -Lo sentimos mucho señora, Alicia ha muerto.
Sacaban una camilla de una de las habitaciones de la clínica. Una mujer lloraba sin consuelo. Pero esa mujer, ¿no era mi madre? -Lo sentimos mucho señora, Alicia ha muerto.