Alison Hamel es víctima de bullying desde los 8 años. Luego de la muerte de su padre, su madre decide mudarse a otra ciudad, allí Alison comenzara una nueva vida, y piensa que podrá olvidar ese pasado del que es prisionera, pero no se imagina que el pasado que tanto quiere dejar atrás volverá a ella... Ella se siente sola... Ella se siente rota... Ella se siente vacía... Alison piensa que jamás saldrá de ese agujero en el que cayó... hasta ese día, el día que unos hermosos y brillantes ojos marrones comienzan a iluminar su camino.

Camila y Lauren son la combinación perfecta para el desastre. Combinación que Shawn Mendes trata de impedir, enviado por su representante para mantener la publicidad de la jóven banda Fifth Harmony. Tienen su destino en las manos, pero el miedo puede corromper una relación que no está preparada para surgir. El peor error sería tomar algo como garantizado porque ni siquiera el desastre lo esta.

Había una vez cuatro hermanas ellas vieron que al mundo le hacía falta algo. Antes, según la leyenda, el mundo se dividía en partes y en cada parte haría una estación. Las cuatro hermanas sintieron que estas estaciones deberían ser compartidas, que todos merecían saber cómo se sentían las diferentes épocas. La más pequeña, hiperactiva y caprichosa de todas, escogió la primavera, ella se encargaría de llevar a todas partes los olores y la armonía de dicha estación. El verano seria aquella alegre, cálida y risueña. La que fuera capaz de llevar el calor y la vitalidad a todos los lugares. Después vino el otoño, aquella hermana pensó que todos debían tener la capacidad de soñar, enmendarse y de mejorar. Ella lo llevo a todos los rincones. Al final vino el invierno... el invierno era frío, cruel y despiadado. Cerrando los ojos ante el sufrimiento. Cuando el invierno llegaba las demás hermanas se ocultaban. Así sucedió. Así lo dicta la leyenda. Así funciona el mundo. Fue así como decidieron que el invierno debía tener corazón de hielo. Mi nombre es Hanna, y yo soy el invierno.