Harry es famoso. Edward es un abogado. Un nuevo Tour, una nueva experiencia, un nuevo temor. El destino jugará en su contra y ellos deberán permanecer juntos para enfrentarlo, pero, las reglas del juego podrían cambiar tal que ellos podrán unirse o...separarse.

Él es normal. Él es famoso. Él pensaba que su vida era aburrida. Él pensaba que su vida era perfecta. Ninguno de los dos pensaba que todo iba a cambiar.

Oh no. -Ya es tarde- dije rendida. Iba a suceder. -Ya no hay salida- dije y empecé a susurrar cosas con la mayor razón. Louis tomo valor y se acercó a mí, trató de abrazarme, pero no lo deje. -NO ME TOQUES- dije con esa misma voz rara, el se corrió hacía atrás, lágrimas salieron por sus ojos. -Sucederá lo mismo-dije, no quería que ellos tuvieran esa vida, no como la mía, no quería que se sintieran una mierda de "persona" si es que hací le podía decir, aún que ya éramos monstruos. -Morirán- dije observando a las personas que estaban enfrente de mi. Todos corrieron, intentado salir de la escuela, pero todas las puertas y ventanas se cerraron, dejándolos sin escapatoria. Por mas que querían salvarse, no podían, las personas que les hicieron daño por años estaban ahí y ellos al despertar los buscarían hasta buscar venganza de los que les habían hecho daño. Como yo, con toda la escuela que se había burlado de mi aquél día. Solo había una persona que yo podía salvar de aquí, además de mi. Ese era Louis. Vi a Marcel y a Niall, sus heridas estaba cerrándose y su cuerpo cambiaba. Cerré los ojos. -3- pausé. -2- continúe. -1- finalicé.