La niñera del Diablo
Ser niñera no estaba en mis planes. Mucho menos ser niñera de la hermana de él. Si alguien me hubiera dicho hace un mes que terminaría aceptando este trabajo, me habría reído en su cara. Pero aquí estoy, en la puerta de una de las casas más lujosas del barrio, esperando a que alguien me abra mientras me repito que tod...