Antes del desastre.
Duele ¿no? Amar más de los que nos aman. Ver el vaso medio lleno cuando en realidad está totalmente vacío. Entregarse por completo y volver en pedazos. Duele. Duele recibir menos de lo que uno da, pero así es la vida, si cometes el error de esperar de vuelta lo mismo que entregas lo único que vas a recibir es dolor.