Las casualidades no existen
Cuando eres adolescente se hacen muchas locuras, como la que una vez hice yo, salía con un chico, Elliot. Hay que decirlo, Elliot era el típico chico guapo que lleva detrás una fila de chicas esperándolo. Yo tuve la suerte de salir con él, pero una noche me entere de algo que me rompió el corazón. En la vuelta de mi v...