Derek Hale podía contar con los dedos de una sola mano las veces que se había sentido celoso alguna vez.

Una noche de luna llena, paso algo, algo que jamas pense que pasaria, algo que me cambio la vida, y no se que hacer, no se lo puedo decir a nadie y menos a mi mejor amigo, no se como reaccionaria Scott, o Lydia o Malia...

Stiles "mamá gallina" Stilinski.

Continuación de "Consiganse otro humano, Stiles es mío".

Las almas que están destinadas a estar juntas ciertamente se unirán en algún momento de la vida, pero hasta ese entonces Derek tiene que soportar que las personas se acerquen e interactúen con su chico. Y Stiles era su humano aunque él todavía no lo supiera.

-"No parecemos tener respues..."-Lo que Scott planeaba en decir no fue completado, un rugido mucho más fuerte se hizo presente. Aquel rugido era mucho más fuerte y poderoso que el de Derek, pero este contenía una palabra o mas bien un nombre incluido, por lo que fue identificado. -"¡Derek!"-Aquel era su nombre, su nombre saliendo de los finos labios de Stiles. Habían muchos aromas fuertes cerca suyo, pero él conocía el de su compañero. Es el que siempre tiene ese toque para relajarlo, aquel que tenía el poder de darle fuerzas, es aquel que amaba. -"Stiles..."-Derek dejó salir su nombre en un susurro lento, casi sin poder creer que habia funcionado. Aquello confirmaba su lazo, tanto sentimental como mental. -"Eso a sido el llamado de una pareja."-Murmura Scott, sorprendido. -"Pero no cualquier pareja, sino mi pareja, mi compañero de vida."-Derek ruge nuevamente y comienza a correr siguiendo el aroma de Stiles. ... Cabe decir que los personajes de esta historia no me pertencen, cada uno de ellos pertenencen a la serie "Teen Wolf" dirigida por Jeff Davis, persona a la que le agradezco por haber creado semejantes personajes.

Stiles Stilinski es un estudiante universitario al que no le interesa enamorarse, ya que dice que las personas siempre salen mal paradas y que además es una perdida de tiempo. Pero para eso llega Derek Hale, para hacerle saber que el amor no es una pérdida de tiempo y enseñarle lo que es querer.

La manada de Beacon Hills acaba de vencer a Peter tras rescatar a Scott in extremis de las garras de Kate y los Berserkers. Y la repentina y breve muerte de Derek Hale antes de evolucionar se convierte en el último impulso que Stiles necesitaba para confesarle lo que llevaba años sintiendo por él. Todo parece estar aclarado entre los dos, con lo que solo queda disfrutar de un apacible regreso a la normalidad en Beacon Hills... Salvo que las cosas no están tan claras entre los dos y enseguida aparece un nuevo enemigo al que nunca pensaron que tendrían que hacer frente: los celos.