Supongo que fue el destino
Emma no es la chica perfecta y no quiere serlo. Peter mucho menos. Emma no quiere un príncipe azul solo a un chico que la quiera. Peter solo quiere sentir amor y ser feliz. Y por absurdo que sea, quiza ambos puedan encontrar lo que buscan entre ellos mismos. Un amor que tal vez ya estaba destinado desde hace mucho an...