Por lo menos, no estoy muerto (I.P.#1)
Bradley Pettersson había pasado por situaciones devastadoras para llegar a ser quien es. El abandono de sus propios padres podría ser una de las primeras razones de su cambio de actitud. Si a eso le sumas una pasión por las apuestas, una tendencia infinita a meter la pata y una sed de libertad impropia de una persona...