Hola, vecino... ¿Tienes sal?
Cuando tu vecino es un dios griego digno de ser alabado como se merece y deseas desesperadamente hablar con él, no se te ocurre otra cosa que llamar a su puerta y pedirle sal.
Cuando tu vecino es un dios griego digno de ser alabado como se merece y deseas desesperadamente hablar con él, no se te ocurre otra cosa que llamar a su puerta y pedirle sal.
¿Qué pasa cuando una chica que nunca se mete en problemas y cree que enamorarse de un playboy es estúpido, tiene como niñero al playboy de la escuela? Supongo que nada bueno.
― Así que dime, ¿Qué te ha motivado para correr desnudo por mi instituto?―preguntó el director, Jose tragó saliva con nerviosismo. ―Bueno, es una larga historia... **Es versión borrador, disculpen los fallos y errores** QUEDA TOTALMENTE PROHIBIDO COPIAR Y/O ADAPTAR. Obra registrada en Safe Creative y en el Registro d...