La vida de Cameron nunca fue un camino de rosas. Tras la muerte de sus padres y de su hermana, se mudó con los Gatewood, unos tíos adinerados muy lejanos y, aunque eran muy amigos de sus difuntos padres, ella siempre se alejó de ellos para salvarlos del mismo destino tragico porque cuanto más amaba, quería o apreciaba a alguien, morían. Tuvo que reiniciar su vida a pesar de tener un pasado difícil. Nuevos amigos, nueva escuela, pero ni siquiera en ese lugar le fue bien. a veces, el destino es una mierda, no? Pero a veces lo malo viene con lo bueno y lo increible, con un chico extremadamente bueno... De vez en cuando el destino no te juega tan malas jugadas, sabes?