OBSESIÓN
-Señorita collins, ¿Acaso es usted idiota?-Dijo molesto. Todos los alumnos se quedaron completamente anonadados ante las palabras de aquél hombre. Emily sintió que le hervía la sangre ¡¿Quien demonios se creía como para llamarla así?! El hecho de que sea su profesor no le da derecho de tratarla de una manera grose...