Eres letal
-Vamos Gia, corre más rápido, más rápido.-se decía para ella misma. Sus pies dolían de tanto correr, pero ¿de que huía? no lo recuerda. Se da cuenta de que sus manos están mojadas, las mira y ve que están llenas de sangre, su ropa está manchada del líquido carmesí. Se detuvo, -¿porqué estoy llena de sangre? pero, no...