Porque te quiero
En 1893. Tras la muerte de la única persona que Meli amaba, decide seguir su corazón, seguir las indicaciones de la carta que ésta le había dejado. Decide conocer a la mejor amiga de su madre, Charlotte, que vivía a no más de 300 millas. ¡No podría ocurrir nada malo! ¡No podría enamorase de su hijo! ¡No podría ser re...