Sé que pensarás que es una más de las historias cliché, pero en las demás hay un patrón que a pesar de ser populares, hay un patrón que hay que romper y desencadenar. Kelia se ve muy marcada por ese patrón, ideal. El alto, ella bajita. El hombre, ella mujer. El mayor y ella menor, muchos otros esteriopitos. Pero lo que no ven es que solo con la base de amar, es más que suficiente para formar un lazo puro y mágico, si hay amor entre medio no hace falta nada más. Y eso la va hacer ver Peter. Porque después de todo: Amor es amor.

Lucas está confundido y lleno de rencor, no quiere ver la realidad y es ciego al observar la luz que siempre está a su alrededor, ¿qué pasará cuándo otra luz lo vislumbre? Juan tiene secretos que ni los más cercanos conocen y se refugia detrás de una falsa excusa que lo hace sentir culpable ¿qué pasará si se vuelve valiente y sana su corazón? Mateo siempre ha sido valiente y alegre de corazón, pero un poco despistado, tiempo atrás dejó que las circunstancias lo impulsarán a tomar malas decisiones que parecieron correctas, ¿qué pasará si decide tomar un nuevo rumbo hacia la decisión correcta, pero por motivos equivocados? Marcos es alguien con el que todos quieren estar: carismático, divertido, leal y sobre todo buen cocinero,¿el defecto más grande que posee? Es muy influenciable y justo eso pasó tiempo atrás con esa promesa que cambio su vida ¿qué pasaría si no teme a quedarse solo porque ya tiene lo que necesita en alguien confiable? ¿Qué pasa si vemos la luz? ¿Qué pasa si sanamos? ¿Qué pasa si cambiamos? ¿Qué pasa si no le tememos a la soledad? ¿Qué pasa si rompemos promesas? ¿Qué pasa si te enamoras de una chica cristiana?

Además, yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas. Llegará el día en que te traeré de regreso a esta tierra. No te dejaré hasta que haya terminado de darte todo lo que te he prometido». Génesis 28:15 NTV