-hsmg-
-Déjame ayudarte...- decía con dolor en sus ojos
-No necesito tu ayuda, ni la de nadie- dije con voz fría, abrió grande sus ojos con sorpresa. Noté un rastro de decepción en su rostro
No me importó. Di vuelta sobre mis talones y emprendí mi camino, dejándolo sólo
«No puedes ayudar a alguien que no quiere ser ayudado»