¡Devuélveme a mi gato!
-¡Mamá, Señor Bigotes no está! -corrí hasta la cocina desesperada buscando a mi pequeño gato blanco. -Habrá salido a buscar gatas, ya volverá. -mi madre respondió tranquilamente. He buscado por toda la casa a Señor Bigotes pero no se encuentra en ningún lugar. Señor Bigotes nunca se va de casa. Vi a una bola de pelos...