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Ella no debió ser revivida por motivos egoístas; debería haber permanecido en su descanso eterno. No había razón para traerla de regreso del mundo de los muertos, ya que no había nada para ella en el mundo de los vivos. Era una no viva, una sacerdotisa que nunca pudo conocer la paz ni disfrutar de una vida como la que muchas chicas sueñan desde pequeñas. Desde muy joven, experimentó el dolor y la soledad, y cuando finalmente creyó haber encontrado el amor en un híbrido, la vida se lo arrebató, entregándole todo lo que le pertenecía a su supuesta reencarnación. Ahora, al estar viva de nuevo, puede sentir el aire mover su cabello y el sol en su piel, pero ya no tiene lugar en el mundo de los vivos; solo es un estorbo que observa cómo su antiguo amor es feliz con quien cree que es su reencarnación. Todos tienen un motivo para vivir, menos ella. Siente que no pertenece a este mundo y anhela regresar a su descanso eterno, hasta que la vida le ofrece una segunda oportunidad con el medio hermano de su antiguo amor, Sesshomaru, el Señor de Occidente.
🚨Advertencia ⚠ esta historia contiene contenido sexual explícito, escenas subidas de tono, entre, otras cosas , y con tenido para mayores de 18 años. Si eres sensible a estas escenas, no digas que no te lo advertí. Si no les gusta las historias con contenido maduro, está historia no es para ustedes.
Chic@s, les pido que si no les gusta la pareja de Sesshomaru y Kikyo, se abstengan de leer la historia y de dejar comentarios negativos. Gracias. Antes de que se me olvide, por favor no denuncien mi historia solo porque Kikyo no les agrada